La
evaluación diagnóstica es un proceso en el cual se elabora una matriz de
evaluación, se diseñan los instrumentos y aplican, se procesa la información
obtenida y se determina cuáles son los problemas que presentan nuestros
estudiantes. El problema identificado representa una oportunidad para proponer
estrategias y actividades que respondan de manera directa a las necesidades de
los estudiantes.
Este proceso
puede tomar en promedio una semana, donde el docente aplica instrumentos para
identificar capacidades y actitudes, es decir establecer un “punto de partida”
que permita comparaciones posteriores, por esa razón la evaluación diagnóstica
es importante, ya que genera información de la situación inicial de los
estudiantes.
Fuente:
ABLeducación