Proyecto Educativo Nacional al 2036: el reto de la ciudadanía plena
La educación peruana es motivo de preocupación de todo el país. A pesar de lo logrado en las últimas
dos décadas, aún nos encontramos muy lejos de asegurar la principal aspiración y compromiso
del Proyecto Educativo Nacional (PEN) desde su concepción original: la educación como derecho
humano fundamental y bien público, es decir, estamos lejos de crear oportunidades para que cada
persona pueda desarrollar plenamente, en libertad y de modo responsable, su potencial y talentos
para construir sus propios proyectos y, al hacerlo, converger en la construcción de una República
democrática y justa, marcada por relaciones de mutuo respeto y valoración entre todas y todos.
Vivimos en un contexto de profunda debilidad institucional, cambios demográficos, sociales y
culturales de gran magnitud, de omnipresencia de medios digitales e innovaciones tecnológicas
y persistencia de grandes y múltiples brechas sociales (asociadas al género, la edad, el nivel
socioeconómico, el origen étnico, el ámbito geográfico, la discapacidad, entre otros) que no
sólo nos mantienen separados, sino que impiden consolidarnos como un país con igualdad de
oportunidades. Por ello, el PEN enfatiza en la necesidad de enfocarnos en lograr la siguiente visión
en los próximos 15 años:
Todas las personas en el Perú aprendemos, nos desarrollamos y prosperamos
a lo largo de nuestras vidas, ejerciendo responsablemente nuestra libertad
para construir proyectos personales y colectivos, conviviendo y dialogando
intergeneracional e interculturalmente, en una sociedad democrática,
equitativa, igualitaria e inclusiva, que respeta y valora la diversidad en
todas sus expresiones y asegura la sostenibilidad ambiental.